¿Qué tipo de aprendizaje debemos elegir para nuestros hijos?
La primavera es un buen momento para empezar algo nuevo. Aprender idiomas y otras habilidades es genial, pero no hay nada mejor que involucrar a los niños en las clases donde desarrollan sus habilidades de comunicación. Hablamos con Shinichi Furuya, Doctor en Medicina y científico de interpretación musical, sobre el Poder de la Música.
Índice
- 1. La educación de la temprana infancia que desarrolle la flexibilidad mental es fundamental
- 2. El apoyo de los padres es crucial para el desarrollo de las habilidades musicales de los niños
- 3. Las clases en grupo ayudan a los estudiantes a desarrollar habilidades de concentración, cooperación y comunicación
La educación de la temprana infancia que desarrolla la flexibilidad mental es clave
Se dice que la educación musical aumenta la Inteligencia emocional (IE), pero ¿es esto cierto? El Dr. Furuya, un científico de la interpretación musical de Sony Computer Science Laboratories, Inc. que comenzó a tocar el piano a los 3 años, ingresó a la Academia de Música Yamaha a los 6 años, y estudió allí durante 10 años, nos ofreció su perspectiva.
Dr. Furuya: Se ha informado que los niños que recibieron educación musical desde la primera infancia tienen una alta IE (Inteligencia emocional). Parecen tener habilidades mejoradas para ejecutar tareas y resolver problemas. En Japón, estas habilidades pueden ser difíciles de adquirir simplemente estudiando en la Academia. Las clases de grupos de discusión son comunes en el extranjero, por lo que los estudiantes de otros países desarrollan estas habilidades de manera más natural. Siento que adquirí estas habilidades en la Academia Música de Yamaha.
Entonces, ¿qué tipo de personas poseen una IE (Inteligencia emocional) alta? Muchos demuestran la capacidad de reconocer su propio estado psicológico, de motivarse, de entender y empatizar con los demás, de construir buenas relaciones y de crear un entorno donde puedan mostrar sus capacidades únicas. En otras palabras, los individuos con IE (Inteligencia emocional)alta atraen a un gran número de colaboradores y como resultado, logran altos niveles de rendimiento.
──¿Por qué la educación musical desarrolla habilidades para resolver problemas?
Dr. Furuya: Cuando estoy aprendiendo música, a menudo me encuentro con cosas que "no puedo hacer". También me ocurrió en la Academia de Música Yamaha. Mi maestro no negó que había cosas que no podía hacer, pero a la vez fomentó en mí la actitud "yo puedo" un paso a la vez. A través de este enfoque, pude acumular experiencias exitosas y seguir avanzando al siguiente nivel.
Este es un método de enseñanza muy lógico. La mayoría de los problemas no se resuelven a la vez. Necesitan ser analizados, divididos en varios componentes, y bajados a un nivel que el solucionador de problemas pueda manejar.
Por ejemplo, si no podía tocar bien una frase musical larga, primero tenía que encontrar la parte que me causaba problemas y luego practicar esa parte. Este es precisamente el mismo proceso que se requiere para resolver los problemas que enfrentamos en la sociedad. Aprendí esto de un maestro de la Academia de Música Yamaha siendo aún niño.
Me dio mucha alegría aprender cómo hacer las cosas que inicialmente no podía hacer. Después de experimentar esto más seguido, empecé a querer solucionar problemas y podía asumir varios desafíos con una mentalidad positiva. Esta experiencia está muy viva y muy dentro de mí en la actualidad.
Se investigó que la conquista de nuevos obstáculos es una forma de vida constante, pero yo creo que siempre puedo encontrar la respuesta si primero defino bien el problema real. Creo que esta capacidad es una gran herramienta en las actividades sociales.
──¿Por qué es bueno empezar en la temprana infancia cuando la mente es flexible?
Dr. Furuya: Los estudios han demostrado que cuanto antes comiences a entrenarte en música, mejor será tu habilidad para reconocer el tono correctamente y sentir el ritmo con precisión. En otras palabras, escuchar bastante buena música y recibir educación musical durante el período del "cerebro flexible" creará un plus de por vida que le permitirá disfrutar profundamente de la música durante el resto de sus días.
Sin embargo, si los niños comienzan demasiado temprano, no entenderán lo que se les dice ni el significado del do-re-mi. La edad ideal para comenzar parece ser entre los cuatro y cinco años. Se sabe que comenzar la educación musical alrededor de este período aumenta el número de células nerviosas en la corteza auditiva, el área asociada con la audición.
En el mundo de la educación pianística, a menudo se dice que es importante escuchar mucha "buena música". La educación musical en la primera infancia es igualmente importante.
Por ejemplo, se sabe que aquellos que comenzaron a tocar el piano a los 7 años tienen más células nerviosas en la corteza auditiva que aquellos que comenzaron a tocar más tarde. También se dice que la capacidad de los niños para adquirir una afinación perfecta termina alrededor de la edad de 8.
Según estudios realizados por el profesor de la Universidad de Harvard Gottfried Schlaug y otros, se descubrió que la corteza auditiva de un niño de 6 años que recibió formación profesional en música durante 1 año y 3 meses contenía más células nerviosas que el de un niño de la misma edad que no fue entrenado. También se concluyó que los niños con un mayor número de células nerviosas tenían una mayor capacidad para sentir el ritmo y la melodía.
El apoyo de los padres es crucial en el desarrollo de las habilidades musicales de los niños.
──¿Cómo deberían contribuir los padres a desarrollar las habilidades musicales de sus hijos?
Dr. Furuya: Creo que hay dos puntos clave aquí. El primero es nunca regañar a su hijo. Desde el punto de vista de los mecanismos de la memoria, no hay beneficios en regañar o enojarse con su hijo. Pero hay, sin embargo, muchos efectos negativos. Recuerdo haber practicado mucho mientras mis padres me regañaban, pero luego fracasé en mi recital de piano. Y por eso, me regañaron otra vez. Era un círculo vicioso. Probablemente fallé porque practicaba mientras me regañaban. Ser regañado constantemente hace que sea difícil recordar las cosas. Ser felicitado, por otra parte, ayuda a que los recuerdos queden fijados en el cerebro.
En segundo lugar, los padres deberían tener un buen entendimiento de cómo funciona el cerebro, y de su capacidad para "resolver las cosas cuando se le deja solo". Algunos padres obligan a sus hijos a practicar una y otra vez hasta altas horas de la noche hasta que aprenden a hacer algo. Creo que si tu hijo no puede hacerlo, debe tomar un descanso o irse a la cama. El cerebro organiza los recuerdos durante el sueño. Recuerdo que no podía tocar una melodía, pero después de dormir toda la noche y despertarme a la mañana siguiente, pude tocarla. Esto me pasó muchas veces.
Las lecciones en grupo ayudan a los estudiantes a desarrollar habilidades de concentración, cooperación y comunicación.
──¿Cuáles son los objetivos de las lecciones en grupo de la Academia de Música Yamaha?
Dr. Furuya: Hay cuatro objetivos principales. El primero es tener un objetivo común para todo el grupo. El segundo es asegurarse de que cada persona tenga un rol. El tercero es crear un entorno en el que los niños puedan participar en una competencia amistosa mientras conversan. El cuarto es asegurar que cada persona tenga una meta y muestre sus logros.
Las lecciones en grupo pasan por el mismo proceso que cuando se lanza un proyecto para resolver un problema social. Las lecciones grupales de la Academia de Música Yamaha perfeccionan las habilidades cooperativas de los niños mientras los proveen de habilidades de presentación.
Por ejemplo, durante una ejecución en ensamble, los estudiantes pueden escuchar e interactuar con las ejecuciones de otros amigos. Cuando toco música, siempre tengo la costumbre de tratar de sentir cómo reacciona la otra persona. Por lo tanto, cuando estoy interpretando, puedo cambiar instantáneamente el contenido y el tono de la historia mientras miro la cara y la apariencia de la otra persona.
Este enfoque también ayuda a los estudiantes a mejorar su concentración y paciencia al escuchar sus propios sonidos, distinguiéndolos de los sonidos producidos por sus amigos y buscando la armonía. Los estudiantes aprenden a llevar a los límites superiores sus esfuerzos.
Aprender a hacer esto de forma natural mientras disfrutaba de mí mismo, fue el mayor logro para mí durante mi estancia en la Academia de Música Yamaha.
──¿Puede la educación musical mejorar, realmente, la capacidad de adquisición del lenguaje y ayudar a distinguir sutilezas emocionales?
Dr. Furuya: Por supuesto. La música y el lenguaje tienen mucho en común. Ambos consisten en entonación, ritmo y gramática. La parte del cerebro que controla el lenguaje es también la que éste usa para procesar la música.
En la conversación diaria, escuchamos sonidos múltiples como las diferencias en la entonación y los altos y bajos de las voces individuales. Muchos músicos son multilingües. Es posible que no siempre sepan palabras específicas, pero son capaces de escuchar cómo suenan estas palabras desconocidas, y por lo tanto, a menudo progresan rápidamente.
Las voces transmiten no solo el significado de las palabras pronunciadas, sino también las emociones del que las dice. ¿Significa esto que los músicos con un buen oído también tienen una mayor capacidad para entender las emociones detrás de la voz de un orador? Según la investigación del profesor Kraus, el tronco cerebral de un músico responde más activamente a la forma de onda compleja creada por la voz de un bebé que intenta expresar algo. El cerebro del músico es más sensible a las voces que tratan de transmitir emociones. Se puede argumentar que la educación musical brinda a las personas una gran cantidad de habilidades para leer las sutilezas de las emociones de otras personas.
Shinichi Furuya
Investigador de Sony Computer Science Laboratories, Inc., nombrado especialmente profesor asociado en la Universidad de Sophia, científico de interpretación musical. Profesor invitado en la Universidad de Música, Teatro y Medios de Comunicación de Hannover.
Graduado en la Escuela de Ciencia en Ingeniería de la Universidad de Osaka, con el diploma de Doctor en Medicina de la Facultad de Medicina. Reconocido como Joven Investigador de Excelencia por el Ministro de Educación, Cultura y Deportes de Japón
Autor de Mecanismo Trascendental: La Ciencia Detrás del Cerebro del Pianista (Shunjusha Publishing), traductor de Todo lo que un Pianista Necesita Saber sobre el Cuerpo. Los intereses de investigación incluyen el apoyo a los intérpretes mediante la dilucidación de las habilidades e inconvenientes de la interpretación pianística.
Como investigador y educador, sueña con establecer una base de investigación y educación tanto en Japón como en el extranjero que pueda contribuir a todos los que aman el piano y a crear un mundo culturalmente rico y sostenible donde todos puedan tocar durante toda la vida la música que imaginan.
Texto: Mikako Wakiya / Fotos: Miho Fujiki
